"Perdona, tienes una nube negra sobre tu cabeza. ¿Te ayudo a ahuyentarla?"

Socialmente no está bien visto encontrarse mal. Cuando alguien te pregunta (exceptuando personas contadas) "cómo estás", es por puro protocolo y por supuesto, la respuesta que esperan es "bien". Y si no estás bien tampoco quieren que les contestes con una verdad

Este post va dedicado a las personas que rodean a los padres y madres de bebés con lesión cerebral, con enfermedades importantes o con problemas de cualquier tipo.

Las personas no nos sentimos cómodas cerca de alguien que está pasando un mal momento emocional, no sabemos qué decirle o cómo actuar. Y al final solemos alejarnos con la excusa perfecta: "es borde/siempre está decaído..." sin pararnos a pensar que seguramente en otro contexto y sin la presión o la tensión que está sufriendo, ese alguien sería totalmente distinto.

Así pues, aunque es muchísimo más fácil alejarnos de las personas con la nube negra encima de su cabeza que entender que quizás lo que más necesitan para quitarse la nube es precisamente apoyo, solemos hacer lo contrario, juzgarlas.

Pero si nos metemos en su caso nos daremos cuenta de que, si cuando tenemos hijos hemos de ser Súper Padres, (o como es mi caso, Súper Madre): atender nuestra vida laboral, conciliarla con el cuidado de los hijos, ocuparnos de nuestra agenda, de nuestro hogar, de vivir... Cuando hay dificultades extra en su desarrollo, todo lo anterior debemos encima compaginarlo con la lucha diaria, que no es poca.

Por supuesto, si podemos afrontarlo todo habríamos de sentir que somos unos héroes y que gracias a nuestro gran esfuerzo salen adelante.

Sin embargo... ¿qué pasa si estos súper padres o súper madres tienen los sentimientos que se esconden en la otra cara de esta misma moneda? ¿Qué pasa si, en vez de sentirse como un/a súper héroe sienten que parte de esta situación (por ejemplo en el caso de una lesión cerebral) es su culpa, o incluso se sienten solos (recordemos que como es lo natural, incluso los más cercanos siguen con su vida mientras tu sigues con tu lucha, y por supuesto no pueden estar ahí para tí siempre)?

La verdad la tiene un sabio dicho: "la vida es muy dura".

Recomiendo a todos aquellos padres y madres, tanto si están en una cara de la moneda como en la opuesta, que busquen grupos de apoyo con personas que estén pasando por una situación similar de manera directa.

Y en cuanto a las personas que viven alrededor de quienes tienen una nube negra en su cabeza: paciencia, pero sobretodo, darles mucho apoyo. Recordar que la apatía no es una característica de estas personas, sinó un estado fruto de la situación.

Nosotros no siempre sabemos pedir ayuda, pero eso no significa que no la necesitemos.