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Terapia restrictiva y recomendaciones

  • Foto del escritor: Susana (unamamaenamorada)
    Susana (unamamaenamorada)
  • 17 abr 2015
  • 2 Min. de lectura

Últimamente, más de un padre y madre han estado preguntando acerca de la terapia restrictiva.

En el apartado "Ejercicios", en la "Jornada de Hemiweb", expliqué un poco lo que nos dijo Rocío Palomo, pero voy a volver a recordarlo: en bebés, es recomendable media hora al día durante seis semanas (repetido dos veces más). Su efecto depende de las dosis, pero suele alcanar hasta 6-8meses. Y hay que buscar ejercicios unimanuales.

Nosotros empezamos a realizarla sobre los 5 meses pero nos dimos cuenta de que en esos momentos no beneficiaba a la mano y brazo no parésicos (izquierdos), no ganaba agilidad con esa extremidad superior izquierda.

Sin embargo ahora hemos decidido volver a intentarlo. Lo ideal es no limitarle el movimiento del brazo sino ponerle una manopla o una venda en la mano para que no pueda utilizarla como mano dominante, pero sí le sirva como mano de soporte mientras realiza ejercicios utilizando la mano parésica como dominante.

Se irrita un poco, pero da resultado.

Por ejemplo, cuando jugamos a que saque objetos de un tarro, ella tiende a ir sacándolos uno a uno con su mano izquierda y dejarlos fuera o lanzarlos hacia el lado izquierdo, de modo que si miras la estampa, acaba haciendo una montaña de objetos en el lado izquierdo y apenas hay ninguno en el derecho.

La terapia restrictiva es la única manera de realizar esto con su mano derecha. Y trabajando es como se gana agilidad y destreza, así que es una buena técnica de trabajo.

Otra recomendación es realizar ejercicios bimanuales donde deba coger por ejemplo, algún objeto más grande y no le quede otra que utilizar ambas manos. De esta manera trabaja la linea media de su cuerpo, la simetría, trabaja su lado no parésico que NUNCA hay que dejarlo de lado, y por supuesto, su extremidad afectada.

Y por último, me gustaría daros una RECOMENDACIÓN: en la medida que podáis, cuando trabajéis el desplazamiento por el suelo, hacerlo quitándoles el pantaloncillo o los leotardos, porque así no les resbalan los pies y las piernas, tienen mejor agarre y por tanto mejor soporte, mayor sensibilidad y con menos esfuerzo pueden realizar mayores logros.

Ayer trabajamos de esta manera y no había color. Una de nuestras fisios nos lo había recomendado pero en pleno invierno era difícil ponerlo en práctica, ahora con el aumento de temperatura propio de la primavera es más fácil.

Nos quedamos sorprendidos, cambiaba de posición sentada a rodillas, hacia tope con los pies y no le resbalaban tanto las piernas, por lo que se manteía en esta posición. Al no resbalarse, levantaba la pelvis con mayor fluidez para ir a buscar objetos que estaban más alejados...

¡GENIAL!

¡Un abrazo!

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