"Navideando"

Hoy voy a cambiar un poco de tema, ya que por encima de la hemiparesia soy una madre "normal" a quien le encanta la navidad con sus luces y su cantidad de planes.

Vivir en una ciudad tiene ciertas ventajas ya que siempre hay algo que hacer. Un plan navideño perfecto antes de las grandes fechas de reunión familiar puede ser: - Dar un paseo por el mercado de Santa Llúcia, donde venden cantidad de artículos navideños. Aparte del que puede haber en tu propia ciudad, el de Tarrasa es muy chulo, está en el centro y es grande; y el de Barcelona, aunque cuesta más aparcar también está muy bien. Incluso si no hay nada que comprar el ambiente y la gran variedad de artículos llaman la atención de los peques. - Dar una vuelta por el centro. Admirar las luces que adornan las calles, las fachadas, los villancicos de los altavoces, la gente buscando sus regalos navideños, la decoración de los árboles... Incluso los tiovivos y los papás noeles que dan caramelos a los niños. - Los centros comerciales suelen hacer actividades para promocionar la venta de juguetes y adultos y pequeños pueden participar en ellas: conducción de juguetes voladores, carreras de coches teledirigidos, "cars", trenes navideños que te llevan a dar una vuelta exprés "hacia el polo norte"... Y la fantástica cantidad de juguetes. Hay tantos que puedes estar horas mirando unos y otros. La ventaja de ir con un bebé es que todavía no te pide nada pero se queda maravillada con todo, ya que todo es nuevo para ella, y la navidad ofrece cantidad de luz y color a sus sentidos. Además, la mezcla del frío con este ambiente da pie al disfrute. - Ir a merendar una taza de colacao o café calentito con un dulce de chocolate a algún lugar agradable.

Y para acabar, nada mejor que llegar a casa después de un largo día y darse un baño caliente con la peque, ponerse en el sofá con una manta y finalizar el día con un poco de relax y unos buenos mimos. Porque al final, sobretodo en Navidad, no hay nada como el hogar.